El ser humano por su propia naturaleza interna necesita del otro para lograr su trascendencia.
Todos seres humanos por su propia naturaleza necesitan del otro. Por lo tanto es natural que la persona en algún momento de su existencia busque encontrarse con una pareja con la cual pueda dar más de sí y con la que pueda entablar una relación profunda y duradera. Originalmente todo ser humano provenimos de una relación en la que se dio un encuentro entre dos personas en donde ambas se entregaron mutuamente, todo lo que ellos eran, aspiraciones, ilusiones, de tal manera que se dio la fecundidad como consecuencia del amor entre dos seres, así mismo todos tendemos a repetir este ciclo de vida, el cual es vital.
Todos necesitamos del otro para crecer, para desarrollar nuestras potencialidades y lograr el auto perfeccionamiento al cual todo ser humano esta llamado. En este sentido es por medio de la relación hombre-mujer y únicamente a través de ella que tanto hombre como mujer pueden lograr la plenitud que buscan, debido a que ambos son complementarios física, psicológica y espiritualmente, es por esta razón que en una relación de pareja llegamos a sentir esta integración de nuestro ser con el del otro, ya que se deja de ser uno solo para convertirse en un nosotros, es decir que en esta relación ya no cabe el egoísmo, sino por el contrario como ya se menciono anteriormente se necesita la entrega y la donación mutua, para lo cual se requiere que exista la reciprocidad entre ambos para que de esta manera la pareja pueda ir logrando paulatinamente la madurez de su relación que implica un crecimiento JUNTOS. Esta es la razón por la cual es tan importante que la pareja al estar consciente de que se une para toda la vida con el otro busque no sólo compartir toda la vida uno al lado del otro, sino que también compartan ideales, valores y el sentido de su existencia, de tal manera que aunque existan diferencias se pueda dar la complementariedad y la integración entre ambos. Es decir una pareja no puede pretender ser complementaria e integrarse si ambos van por diferentes caminos, tienen diferentes ideales y no comparten valores fundamentales.
Por lo tanto el ser humano por su propia naturaleza interna necesita del otro para lograr su trascendencia, de tal manera que la persona que es llamada a entablar una relación de pareja, es por medio del matrimonio Hombre y mujer que se logra esta complementariedad, integridad, unidad, fecundidad y por lo tanto la trascendencia del ser que implica LA PLENITUD, a la cual todos estamos llamados y de una manera o de otra estamos en su búsqueda.