Vivir para ver. Leo que «El Senado apoya la iniciativa de Podemos de garantizar el aborto «gratuito» en toda España». Lo que faltaba para que el crimen del aborto se considere inocuo, que no lo es, y, además, un derecho. España va a la cabeza del aborto en Europa. No es un honor.
Me faltan palabras para descalificar la acción perpetrada contra seres humanos inocentes vivos en las entrañas maternas. Como indicó San Juan Pablo II, «el aborto provocado es gravemente inmoral». Lo que cabe es la ayuda a toda mujer embarazada que lo necesite.
¿Se darán cuenta, algunos, de han sido alzados en la `política con muchísimos votos de cristianos, que, por su vocación al amor, no pueden aceptar la matanza de niños nonatos? Con los no nacidos, todos tenemos un deber de protección, por justicia y caridad. ¿Qué partido nos queda, en la política española, que defienda la vida de todos, o sea, desde la concepción hasta la muerte natural? Muchos anhelan un cambio positivo en el PP, que se constituyó como fuerza política defensora de la vida. Vivimos inmersos en una «estructura de pecado» que envuelve a importantes sectores políticos y sociales. Inadmisible. ¿Falta de formación moral? ¿Falta de vergüenza, o las dos cosas a la vez?
Por Josefa Romo